«Yo no he venido a ser servido, sino a servir»
Este sábado 31 de agosto, tuvimos la alegría de compartir una jornada con los apoderados que son delegados de Pastoral. Ellos a la vez invitaron a un apoderado más de su curso.
Juntos fuimos reconociendo la importancia de «ser servidores» en medio de nuestro colegio y formar parte de una comunidad, llamada a ser testimonio que contagia el Amor de Jesús en nuestro entorno, mirando con sus ojos a quienes están a nuestro lado, asumiendo un rol activo frente a las necesidades que nos rodean.
Los frutos de esta jornada quedaron plasmados en desafíos con las niñas, las familias, los profesores y nuestra sociedad.
Invitamos a que en otro momento se puedan sumar nuevas voluntades.